Acaba de salir un color nuevo que es la última moda en decoración y gusta a rabiar: el coral. Queda bien con todo y en cualquier rincón de casa, porque es un color luminoso, vivo y alegre que da un toque especial a nuestra decoración. Combina de maravilla con blancos, negros, colores naturales y con colores llamativos.
La tonalidad cálida y femenina de este color es ideal para transformar una lámpara de mesa sosa y corriente, en una bonita lámpara retro con Chalk Paint coral. La pintypluser Sra. Cricket, especialista en elementos decorativos para el hogar, nos guía en el siguiente paso a paso hasta conseguir un objeto decorativo con estilo y personalidad.
Materiales necesarios:
- Una lámpara de mesa con soporte de madera
- Un bote de spray PintyPlus Chalk Paint Coral
- Tela para forrar la pantalla
- Pegamento para tela
- Pinzas de tender la ropa
- Cinta de carrocero
Paso 1.Prepara la lámpara que vas a transformar
Es importante elegir bien el modelo. El soporte ha de ser en madera, y cuanto más largo y tallado esté, más impactante será el resultado. Una lámpara de mercadillo de segunda mano, esa lámpara que rescataste de casa de tu abuela o una que te regalaron no sabes cuándo y nunca supiste dónde colocarla… Puedes estar segura que esa será la lámpara ideal para convertirla en un nuevo objeto de deseo.
Una vez elegida, separa la pantalla desenroscándola del soporte, y déjala en dos piezas independientes con las que trabajarás por separado.
Paso 2.Prepara la tela para forrar la pantalla
Elige una tela que te guste y que combine bien con tu lámpara y la habitación donde desees colocarla. Para esta guía se ha utilizado una tela animal print de poliéster, de inspiración dálmata. Puedes elegir la misma, pero también te combinará igual de bien una que imite la piel de cebra, de leopardo, o directamente cualquiera que tenga un estampado original y atrevido. ¡Olvídate de blancos, beiges y tonos apagados!
A continuación, recorta la tela a medida del tamaño de la pantalla, de manera que quede bien envuelta y deja que sobre algo más de un centímetro por arriba y otro por abajo para los acabados
Paso 3.Forra la pantalla con la tela elegida
Aplica pegamento especial para tela por toda la pantalla, repasando bien los bordes y cada esquina. A continuación, fija bien la tela presionando y aplica pinzas de tender la ropa por todo el borde superior doblado hacia adentro, para que quede bien pegado. Haz lo mismo con la parte inferior y deja la parte sobrante con pinzas colgando para que hagan de contrapeso y no queden irregularidades. Una vez tengas toda la pantalla cubierta, presiona suavemente las telas para que la superficie esté bien lisa en todos los lados. Deja secar.
Paso 4. Pinta el pie de la lámpara con PintyPlus Chalk Paint Coral
Primero, protege las partes del pie de la lámpara que no vas a pintar: el cable y la rosca donde va la bombilla. Aplica la cinta de carrocero ahí delimitando bien cada zona, para que queden bien cubiertas. Cubre el suelo o la mesa donde vayas a pintar con papel de periódico, plástico o cualquier material desechable.
A continuación, aplica el spray Chalk Paint Coral de Pintyplus a una distancia aproximada de 20-25 centímetros. Pinta una o varias capas en sentido vertical y después en sentido horizontal para cubrir bien la madera y que no queden partes sin pintura.
Paso 5. Monta de nuevo la pantalla en su soporte
Aplica pegamento en la parte inferior sobrante de la tela que utilizaste para forrar, dóblala y pégala en la parte interior de la pantalla. Aplica unos minutos las pinzas para que agarre bien mientras se acaba de secar el pie de tu lámpara. Pasados quince minutos, la pintura PintyPlus ya se habrá secado; retira la cinta de carrocero, enrosca la bombilla y coloca la pantalla. ¡Y ya tienes tu lámpara lista!
Como puedes comprobar, la lámpara luce irreconocible tan sólo aplicando estos dos elementos. Un trabajo que hacemos en una tarde, casi tan efectivo y rápido como Photoshop, y tan real como un cambio de estilo. El nuevo color en spray Pintyplus Chalk Paint Coral, o pintura a la tiza coral, tiene un acabado vintage que nos ha enamorado, tanto por su tonalidad como por su acabado mate.
